Saltar al contenido

Javier Milei, la motosierra en el cuello de la izquierda

javier milei

“Quiero decirles a todos los argentinos que hoy comienza el fin de la decadencia argentina”, manifestó apenas conocida su victoria este economista de 53 años, dispuesto a encausar a su país por caminos desconocidos.

Por: Jolguer Rodríguez Costa

Ni su dura posición contra al papa Francisco, a quien llamó “el representante del maligno en la tierra” (y a la vez referido en la contienda por su contrincante Sergio Massa como “el argentino más importante del mundo”), pudo evitar que el 56% del electorado lo eligiera como presidente de Argentina.

No en balde, uno de los iconos de la campaña de Javier Milei fue una motosierra, que resalta onomatopéyicamente su excéntrica personalidad, proclive a cortar sin contemplaciones, radicalmente, todo lo que huela a izquierda y estatismo.

Ultraderechista y anarcoliberal declarado, ha prometido, sin tapujos, romper drásticamente con los últimos 20 años de dominio peronista. Admirador de Donald Trump y Miguel Bolsonaro, asumirá la presidencia a partir del próximo 10 de diciembre, dispuesto a ejecutar medidas de emergencia, desde la dolarización de la economía hasta la eliminación del Banco Central, tareas que sus propios asesores estiman ardua y factible tras uno o dos años de gestión.

Analistas coinciden en que no le será fácil resolver su agenda con fluidez, sobre todo por la escasa participación de su partido (Libertad Avanza) en el Congreso y el Senado; ello le obligaría a pactar con otros partidos de derecha, especialmente el del ex presidente Mauricio Macri.

Milei deberá enfrentar una tasa de inflación de 150% y una de pobreza que afecta el 40% de la población. Asegura que llegará a un “rápido acuerdo” con el FMI, para devolver el préstamo de 45.000 millones de dólares otorgados por el ente financiero en 2018.

Ante tal fin, ha dicho que recortará sustancialmente el gasto público, incluso por encima de lo que exige el FMI.

En lo internacional, planea fortalecer sus lazos con Estados Unidos e Israel, así como su alejamiento de China y Brasil, actualmente los principales socios comerciales de Argentina. Aunque no ha precisado las relaciones con el resto de América Latina, especialistas opinan que habrá que esperar un tiempo prudencial. Sin embargo, unos prevén que su proyecto de liberalizar el comercio lo llevará a abrirse a acuerdos.

Otros destacan el carácter «aislacionista» de este tipo de liderazgos, que tienden a aplicar sus políticas sin un mayor diálogo ni coordinación con sus vecinos.

Quizás, al haber ondeado la bandera de Venezuela en plena campaña, haya asomado la posibilidad de empuñar su motosierra contra este y otros regímenes totalitarios de la región. Amanecerá y veremos.

También le podría interesar Javier Milei logra una contundente victoria electoral y propone un vuelco a la política de Argentina con sus propuestas radicales