Además, hizo un llamado urgente a favor de un intercambio general de prisioneros entre Rusia y Ucrania, proclamando enérgicamente: «¡Todos por todos!».
Por: La redacción
En una declaración el Papa Francisco emitió una advertencia enfática contra el creciente clamor de la guerra que amenaza con azotar a Europa y al Mediterráneo. Bajo el firme lema de «No permitamos que los vientos de la guerra soplen cada vez más fuertes», instó a la comunidad internacional a resistir la lógica destructiva del rearme y las armas.
«La paz nunca se forja con la violencia, sino con gestos de reconciliación y apertura de corazón», subrayó el líder, destacando la importancia de adherirse a los principios del derecho internacional en todos los conflictos.
Además, hizo un llamado urgente a favor de un intercambio general de prisioneros entre Rusia y Ucrania, proclamando enérgicamente: «¡Todos por todos!». El líder no dejó de lado la difícil situación en Siria, donde catorce años de sufrimiento han dejado cicatrices profundas, ni la crisis en el Líbano, agravada por hostilidades fronterizas con Israel, instando a la comunidad internacional a redoblar los esfuerzos para abordar estas crisis.
Asimismo, expresó su apoyo a las conversaciones en curso entre Armenia y Azerbaiyán, llamando a un diálogo continuo para alcanzar una paz duradera en la región.
Finalmente, el líder global extendió su solidaridad a las víctimas de todo tipo de terrorismo, implorando por aquellos que han perdido la vida y abogando por el arrepentimiento y la conversión de los perpetradores de estos crímenes.