Por otro lado, un grupo de ciudadanos adoptó una postura de sátira al presentarse disfrazados de conejos y castores, en un gesto de crítica hacia el evento.
Por: La redacción
En esta primera jornada de elecciones en Rusia, la atención no solo se centró en la participación de la oposición, sino también en las estrategias desplegadas por los seguidores y el equipo del Presidente Putin para asegurar su continuidad en el Kremlin.
Desde tempranas horas, se observó una coincidencia notable entre muchos empleados estatales y miembros de las Fuerzas Armadas, quienes se presentaron simultáneamente, intentando disimular las órdenes recibidas para demostrar un fuerte respaldo al actual mandatario.
Sin embargo, surgieron sospechas entre la oposición cuando las autoridades anunciaron un supuesto colapso del sistema de voto electrónico debido a una participación extraordinariamente alta, exacerbando las preocupaciones sobre la transparencia y la fiabilidad de este método.
Adicionalmente, se observaron diversas iniciativas para estimular la participación electoral a favor de Putin, como rifas en distintas ciudades rusas, donde se ofrecieron premios como departamentos, autos y servicios gratuitos, generando debate sobre la ética y la legitimidad del proceso electoral.
Por otro lado, un grupo de ciudadanos adoptó una postura de sátira al presentarse disfrazados de conejos y castores, en un gesto de crítica hacia el evento.
A estas dinámicas se suma la convocatoria del difunto opositor Alexei Navalny para el evento «Mediodía con Putin», con el objetivo de concentrar a la oposición en los distritos electorales de todo el país, denunciando posibles fraudes y buscando llamar la atención de la comunidad internacional sobre la legitimidad de los resultados.